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Entrena tu velocidad de escritura con la pista de carreras

Acelerar: escribir más rápido

Especialmente en los dictados o al copiar imágenes de la pizarra, la rapidez en la escritura cuenta. El entrenamiento específico facilita la escritura rápida.

Acelera

El comienzo del curso escolar es un momento emocionante para los pequeños alumnos de infantil. Un entorno desconocido, nuevos amigos y aprender algo nuevo cada día. Sin embargo, al cabo de un tiempo, muchos niños se enfrentan al mismo reto: escribir de forma rápida pero legible. Esto se debe a que, al principio, los escritores noveles tienden a calcar las formas de las letras en lugar de escribirlas realmente. Como consecuencia, se centran tanto en la letra individual que deben escribir que la ortografía o el contenido pasan a un segundo plano. Esto puede provocar problemas de rendimiento, sobre todo en los cursos superiores. La causa suele ser la misma: la automatización de los movimientos básicos que los niños necesitan para escribir a mano con fluidez aún no está totalmente desarrollada. Si las letras se pueden poner en el papel sin pensar, es decir, automáticamente, la escritura es más rápida y queda más concentración para el contenido. Ya en la edad preescolar, las formas parecidas a las letras deben entrenarse centrándose en la velocidad y transferirse más tarde a la escritura de letras. Esto se debe a que el ajuste de la velocidad de dibujo o escritura y la aceleración correcta constituyen la base de una escritura rápida y fluida.

Ejercicio de motricidad escrita "La pista de carreras”

El ejercicio de la pista de carreras, por ejemplo, es ideal para fomentar la velocidad de escritura.

Junto con los niños, hicimos un circuito con las cinco formas básicas a partir de las cuales se pueden colocar todas las letras mayúsculas del alfabeto. De este modo, los niños se familiarizan con las formas de las letras incluso antes de empezar el juego. En el siguiente paso, el circuito se convierte en una pista de aventuras: ¡Adelante! Colocados en la línea de salida, dos niños se enfrentan con los lápices. Tras la señal de salida, corren por la pista lo más rápido posible, frenando en las curvas y saltando el peligroso río. De este modo, los niños interiorizan las formas básicas que luego necesitarán para escribir las letras, y aprenden a utilizar la velocidad de forma lúdica. La motricidad escrita que se fomenta de este modo es una preparación ideal para la escritura. Lo ideal es que los pequeños corredores puedan aplicar luego lo aprendido -frenar en las curvas y acelerar en los tramos rectos- al escribir las letras y, así, ser más rápidos en general..